La presidenta Claudia Sheinbaum señaló que México atraviesa una nueva etapa de justicia con la llegada de Hugo Aguilar Ortiz a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Revista Guinda te trae la información.
Durante un evento en Colima, Sheinbaum destacó que este cambio forma parte de la transformación que iniciará el 1 de septiembre, cuando entre en funciones el Nuevo Poder Judicial.
Dirección de la SCJN a cargo de Hugo Aguilar Ortiz
Claudia Sheinbaum subrayó que, después de Benito Juárez, será la primera vez que la SCJN esté encabezada por una persona de origen indígena. Hugo Aguilar Ortiz asumirá el cargo de presidente del máximo tribunal del país tras un proceso de elección directa.
La presidenta Sheinbaum resaltó que la elección de Aguilar Ortiz representa un hecho histórico que no habría ocurrido sin las reformas recientes al Poder Judicial.
Nuevo Poder Judicial: cambio en la elección de jueces y magistrados
De acuerdo con Sheinbaum, el Nuevo Poder Judicial permitirá que jueces, magistrados y ministros sean electos mediante el voto ciudadano. Consideró que esta medida garantizará que las autoridades judiciales respondan únicamente al pueblo y no a intereses externos.

La presidenta afirmó que el nuevo esquema fortalece la legitimidad de los integrantes del Poder Judicial y transforma la vida pública del país.
Un nuevo capítulo en la justicia mexicana
El nombramiento de Aguilar Ortiz se enmarca en un proceso de renovación que, según el gobierno federal, busca acercar la justicia a la ciudadanía y reforzar la confianza en las instituciones.
Sheinbaum sostuvo que la representación indígena en la SCJN refleja la diversidad del país y envía un mensaje de inclusión. Además, remarcó que el voto popular en la elección de cargos judiciales es un paso hacia una justicia más transparente.
El inicio de funciones del Nuevo Poder Judicial el próximo 1 de septiembre será acompañado por la integración de nuevos jueces y magistrados en todo el país. Las reformas impulsadas por el Ejecutivo establecen que todos los cargos del sistema judicial se sometan a elección popular.
La administración federal asegura que este modelo incrementará la rendición de cuentas y fomentará un mayor compromiso con las necesidades de la sociedad.