Una nueva investigación judicial ha puesto sobre la mesa más pruebas contra Adán Augusto en Tampico, conectadas con una red de huachicol fiscal que operaba en los puertos tamaulipecos de Tampico y Altamira. Revista Guinda te trae los detalles.
Sospechas en el puerto jaibo
En el corazón de la polémica está el muelle 289 —también conocido como “Terminal 11”— operado por Tampico Terminal Marítima S.A. de C.V. Un testigo protegido declaró que embarcaciones con diésel llegaban al puerto declarando carga como “aditivos” para evitar controles fiscales.
Ese mismo testimonio señala que el almirante que supervisaba operaciones marítimas advirtió que “no se metiera con ellos” porque el operador tenía “lazos y muy buena amistad con Adán Augusto López Hernández”.
La concesión del muelle fue otorgada por la ASIPONA Tampico, existiendo además información de operaciones coordinadas con el vecino puerto de Altamira, se convierte esto en una pieza clave del expediente. La Fiscalía General de la República (FGR) ya investiga los flujos financieros, los contratos aduanales y el papel de los intermediarios en esta operación.
También aparece vinculado al caso Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad de Tabasco durante el tiempo que Adán Augusto López fue gobernador de la entidad, señalado por dirigir el crimen organizado y recientemente detenido en Paraguay y preso en las instalaciones de El Altiplano.
Estas nuevas evidencias apuntan al recinto fiscal 289 en Tampico, al operator del muelle y a vínculos políticos que complican el panorama del senador.
Más pruebas contra Adán Augusto en Tampico: avance de la carpeta
En los documentos judiciales se han incorporado declaraciones de funcionariado naval y aduanero que describen sobornos, pagos en efectivo y el ingreso no fiscalizado de combustible. En algunos de esos documentos se menciona explícitamente más pruebas contra Adán Augusto en Tampico, al vincular su cercanía política con el concesionario del muelle.
El exdirector de la Aduana de Tampico, que figura como testigo protegido, aseguró que entre abril de 2024 y enero de 2025 permitió que al menos 14 buques con huachicol fiscal arribaran a ese punto, a cambio de pagos millonarios.
El empresario que administra la concesión portuaria, Saúl Vera Ochoa, mantenía lazos y “muy buena amistad con Adán Augusto López Hernández”. Vera Ochoa incluso impulsó la precandidatura presidencial de Adán Augusto López. lo impulsó públicamente, lo cual como mínimo luce sospechoso.
Siguiendo el hilo de la madeja
El caso no solo se inscribe en un escenario local: se ha presentado una solicitud de juicio político contra Adán Augusto López, con base en las recientes acusaciones. Éste se ha defendido calificando las acusaciones en su contra como “mafufadas”. Si bien Hernández Bermúdez Requena no está directamente dentro del expediente portuario en Tampico, su nombre y el escándalo político refuerzan la sospecha en contra del senador, sus redes de poder y conexiones más allá de Tabasco.
¿Implicaciones penales?
Si los nuevos elementos se sostienen ante juez, podría abrirse un juicio penal en contra de Adán Augusto o al menos obligarlo a rendir cuentas formales. Además, la presión política y mediática lo coloca en una coyuntura crítica.
La ciudadanía reclama transparencia: es probable que este caso marque un precedente sobre cómo se investigan vínculos entre poder político y redes ilegales que operan en entornos aduanales o portuarios.