El Mercado petrolero cierra 2024 con pérdidas: El precio del barril se aleja de los 100 dólares pronosticados
El mercado del petróleo finalizó 2024 con pérdidas significativas, alejándose de los pronósticos que apuntaban a un precio de 100 dólares por barril, a pesar de las crisis geopolíticas que generalmente impulsan los precios del crudo.
Hasta el cierre de la jornada del 30 de diciembre, el West Texas Intermediate (WTI), principal referencia para el mercado petrolero estadounidense, registró una caída de 0.88%, situándose en 71.65 dólares por barril. Por su parte, el Brent, indicador clave para los mercados de Medio Oriente, Europa y África, sufrió una pérdida de 3.44%, pasando de 77.04 dólares por barril en diciembre de 2023 a 74.39 dólares en la misma fecha de 2024.
La mezcla mexicana de petróleo no fue ajena a esta tendencia negativa, con una baja de 2.08%, al pasar de 67.65 a 66.24 dólares por barril. El comportamiento del mercado se vio influenciado por la fortaleza del dólar durante gran parte del año, lo que ejerció presión sobre los precios del crudo.
A pesar de las tensiones geopolíticas que tradicionalmente favorecen el alza de los precios, factores económicos globales como los estímulos en China y la caída de los inventarios de crudo en Estados Unidos no lograron compensar el débil desempeño del mercado. Norbert Rücker, jefe de economía en Julius Baer, señaló que la demanda de petróleo en China parece haber alcanzado su punto máximo, lo que hace prever un panorama menos optimista para 2025.
Además, la creciente producción de petróleo en América del Norte y del Sur, así como la incertidumbre en torno a la política petrolera de la OPEP y sus aliados, incluidos Rusia y Kazajistán, podrían continuar afectando la estabilidad de los precios en el futuro. Rücker advirtió que, aunque la geopolítica ha jugado un papel alcista en 2024, la política petrolera podría ser un factor a la baja para el próximo año, prediciendo que el precio del petróleo podría mantenerse en torno a los 65 dólares por barril en 2025.
En este contexto, el mercado petrolero parece enfrentar un futuro incierto, marcado por un equilibrio entre la oferta, la demanda y las dinámicas geopolíticas que seguirán determinando la cotización del crudo en los próximos meses.