Prohibición de cigarrillos electrónicos en México: Un paso hacia la protección de la salud pública
A partir del 18 de enero de 2025, quedó prohibida en México la producción, comercialización y distribución de cigarrillos electrónicos y vapeadores.
Esta medida se formalizó mediante un decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación por la presidenta Claudia Sheinbaum, que adicionó un párrafo quinto al artículo 4 y un párrafo segundo al artículo 5 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La modificación constitucional busca garantizar el derecho a la protección de la salud, sancionando cualquier actividad relacionada con cigarrillos electrónicos, vapeadores y dispositivos análogos, así como la producción y distribución de sustancias tóxicas y drogas sintéticas no autorizadas. El artículo 5 establece la prohibición de profesiones, industrias y comercios relacionados con estas actividades.
Aprobación legislativa y plazos de armonización
El dictamen fue aprobado por la Cámara de Diputados el 2 de diciembre de 2024, con una mayoría calificada de 410 votos a favor, 24 en contra y ninguna abstención. El decreto también establece que el Congreso de la Unión tiene 180 días para armonizar el marco jurídico con el contenido del decreto, mientras que las legislaturas estatales deben hacer las adecuaciones necesarias dentro de los próximos 365 días.
Críticas y opiniones sobre la prohibición
La medida ha generado diversas reacciones. Salomón Chertorivski, exsecretario de Salud federal, manifestó que antes de proceder a la prohibición, el gobierno debió considerar una regulación estricta para garantizar la transparencia sobre los componentes de estos productos. Chertorivski advirtió que la prohibición podría fomentar un mercado negro, aumentando el riesgo para los consumidores debido a la falta de información sobre las sustancias contenidas en los dispositivos clandestinos.
Riesgos asociados a los vapeadores
Un estudio del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conacyt) reveló que muchos vapeadores comercializados en las calles contienen más de 30 sustancias no declaradas, a pesar de que sus etiquetas solo mencionan glicerina, propilenglicol y saborizantes. Entre las sustancias identificadas se encuentran químicos como benceno, xileno y acetato de vitamina E, este último vinculado a daños pulmonares graves.
Fabiola Macías Espinoza, de la Universidad de Guadalajara, subrayó que el acetato de vitamina E puede obstruir los alvéolos pulmonares, afectando el intercambio de oxígeno y dioóxido de carbono, lo que representa un serio riesgo para la salud.
Impacto en la salud pública
Con esta prohibición, el gobierno mexicano busca proteger a la población de los riesgos asociados al consumo de vapeadores y cigarrillos electrónicos. Las autoridades han reiterado su compromiso de garantizar la salud pública mediante la aplicación estricta de esta nueva normativa.