Leyendo ahora
La ‘Legislativa del Pueblo’: Un Estreno Marcado por la Controversia y el Descontento.

La ‘Legislativa del Pueblo’: Un Estreno Marcado por la Controversia y el Descontento.

Avatar photo

La llamada “Legislativa del Pueblo”, una estrategia de comunicación impulsada por la bancada de Morena que emula las conferencias matutinas de la presidenta Claudia Sheinbaum, nació con un propósito claro: establecer un canal de información directa entre los legisladores y la ciudadanía. Sin embargo, lejos de fortalecer la imagen del partido en el Congreso, su lanzamiento generó una ola de críticas y descontento, particularmente contra el diputado vocero, Arturo Ávila Anaya.

Desde su convocatoria, el evento estuvo envuelto en la polémica. La invitación, distribuida a través de un chat de prensa, detallaba que la presentación de la sala de prensa—con un costo superior a los dos millones de pesos—incluía una mecánica poco convencional: una tómbola para seleccionar a los reporteros que podrían hacer preguntas, con un criterio de paridad de género. Esta disposición, lejos de ser bien recibida, provocó una cascada de reclamos y burlas entre los periodistas que cubren la fuente legislativa.

“¿Por qué no hacemos una tómbola para ver qué bancadas cubrimos mañana?”, ironizó una reportera. Otro periodista comentó en tono sarcástico: “Uta, con la suerte que me cargo, nunca me va a salir la bolita, aunque me apunte en todos los géneros”. La situación escaló hasta el punto en que algunos sugirieron que la tómbola debería aplicarse también para la elección de magistrados.

Más allá del humor y la inconformidad, varios comunicadores expresaron su preocupación por la medida, argumentando que restringía su labor periodística y que afectaba la autonomía de los medios para definir su propia cobertura. “Cada medio de comunicación asigna a sus reporteros de acuerdo con su agenda editorial. No vamos a aceptar que nos impongan esquemas que sólo han funcionado con los medios afines a la Cuarta Transformación en Palacio Nacional”, enfatizó un periodista.

En respuesta a la creciente molestia, Ávila Anaya intentó calmar los ánimos con un mensaje de voz en el chat de reporteros: “Es un motivo de enorme felicidad verlos mañana, lo que queremos es darles un detallito, un detalle chulo”. Sin embargo, lejos de apaciguar los ánimos, sus palabras avivaron aún más la indignación.

Para muchos, el comentario evocó un episodio previo en el que Mario Rafael Llergo, entonces diputado de Morena, increpó a una reportera de larga trayectoria durante una conferencia de prensa en 2022. En aquella ocasión, el descontento entre los periodistas se disipó únicamente después de que Ignacio Mier Velazco, coordinador de la bancada morenista, ofreciera disculpas y enviara a la sala de prensa decenas de tortas en un intento fallido por suavizar el malestar. Nadie las comió.

Esta vez, la expresión “detallito chulo” no hizo más que exacerbar la indignación. “En otras legislaturas ya hubo lamentables episodios en los que, después de faltar al respeto a reporteras y reporteros, se intentó compensar con detalles como tortas. Eso es algo que rechazamos”, señaló un periodista. Otra reportera calificó la expresión como “inadmisible y una falta de respeto”.

Ver también

Lejos de enmendar la situación, Ávila Anaya decidió agregar más leña al fuego con una respuesta desafiante: “Ofrezco una disculpa si su imaginación llegó a otra idea, en mi caso no llega tan lejos”. Sus palabras fueron recibidas con indignación inmediata. “¿Qué es eso, diputado? Qué falta de respeto”, respondió una reportera. Otro periodista criticó su actitud: “Vaya respuesta más torpe, diputado”.

El malestar generado por la actitud del vocero de Morena llevó a que Ricardo Monreal Ávila, coordinador del grupo parlamentario, ofreciera una disculpa antes de iniciar la sesión de preguntas con la prensa. “Nada de tómbolas porque ya hay muchas”, bromeó, provocando risas entre legisladores y periodistas. Sin embargo, también intentó justificar a Ávila Anaya, a quien describió como “inquieto, hiperactivo, el gran Arturo”.

Pese a los intentos de apaciguamiento, la credibilidad del vocero quedó en entredicho. Insistió en que cuando habló del “detallito chulo” se refería a proporcionar sillas para los reporteros, café y galletas durante las conferencias. Pero para entonces, ya nadie le creyó.

View Comments (0)

Leave a Reply

Your email address will not be published.

© 2024 Grupo Gremol. Todos los derechos reservados