México despliega Ejército y Guardia Nacional en la frontera norte tras acuerdo con Trump
El gobierno de México inició el despliegue de elementos del Ejército y la Guardia Nacional en la frontera norte, como parte del acuerdo alcanzado con Estados Unidos para movilizar 10 mil efectivos con el fin de combatir el tráfico de fentanilo y otros delitos fronterizos. Este movimiento permitió aplazar la imposición de aranceles a las exportaciones mexicanas, una medida que había sido impulsada por el expresidente Donald Trump.
Primer despliegue de tropas en la frontera
Desde la mañana de este jueves, 2,700 elementos del Ejército partieron desde el Campo Militar 1-A en la Ciudad de México hacia distintos municipios de Baja California, Chihuahua, Sonora y Tamaulipas. Asimismo, 990 efectivos de las bases militares de Quintana Roo y Yucatán se movilizarán vía aérea a diferentes puntos estratégicos en Baja California, Sonora y Tamaulipas.
El despliegue de seguridad continuará en los próximos días, con el traslado de más efectivos desde distintos estados hacia municipios fronterizos con Estados Unidos.
Acuerdo bilateral: seguridad en la frontera y suspensión de aranceles
Este lunes, la presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que, como parte del acuerdo alcanzado con el gobierno de Donald Trump, se llevará a cabo la movilización de 10 mil elementos de seguridad en la frontera para reforzar la lucha contra el narcotráfico, especialmente contra el tráfico de fentanilo.
Desde el inicio de su campaña, Trump ha ejercido una fuerte presión sobre México en temas de seguridad fronteriza, vinculando la imposición de aranceles a la capacidad del gobierno mexicano para contener el tráfico de drogas y la migración ilegal. Este acuerdo representa un nuevo esfuerzo diplomático para evitar sanciones económicas a las exportaciones mexicanas, mientras se fortalece la cooperación en materia de seguridad.
El despliegue de militares y agentes de la Guardia Nacional busca no solo contener el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos, sino también reducir los niveles de violencia y crimen organizado en las zonas fronterizas más afectadas.