“Es hora de neutralizar a los generadores de violencia” afirma Claudia Sheinbaum
Dado que la tendencia de homicidios en México sigue sin mostrar una disminución significativa, el organismo México Evalúa ha señalado que el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo debe tomar medidas decididas para neutralizar las inercias del sexenio anterior si realmente pretende evitar que en 2030 se siga hablando del sexenio más violento de la historia.
Para alcanzar la pacificación del país, México Evalúa destaca la necesidad de disminuir los homicidios dolosos, especialmente aquellos vinculados a la delincuencia organizada, así como de enfrentar con mayor eficacia los delitos de alto impacto, como la extorsión, el secuestro y el robo con violencia en vías generales de comunicación. Estos crímenes no solo generan un clima de inseguridad en las comunidades, sino que también afectan gravemente la economía y la confianza de los ciudadanos en las instituciones.
El análisis de México Evalúa subraya que para frenar la violencia, es imperativo neutralizar a los generadores de violencia y desmantelar las redes criminales que operan en las regiones más afectadas por la inseguridad. Esto requiere de un enfoque integral que no solo se centre en la detención de los delincuentes, sino también en la atención a las zonas con alta incidencia delictiva, donde la presencia del crimen organizado ha aumentado la violencia y el temor entre los habitantes.
Además, el informe destaca que, para lograr una verdadera pacificación del país, el gobierno debe mejorar el diálogo con los diversos sectores de la sociedad, incluidos los líderes comunitarios, las organizaciones civiles, y las autoridades locales. La cooperación y el entendimiento mutuo son claves para construir una estrategia de seguridad más efectiva, que no solo aborde las causas estructurales de la violencia, sino que también fomente la participación de todos los actores involucrados en la lucha contra el crimen.
En resumen, México Evalúa hace un llamado urgente a que el gobierno de Sheinbaum implemente políticas de seguridad más eficaces y un enfoque preventivo, que no solo combata el crimen, sino que también trabaje en la construcción de un entorno social y económico más seguro, para evitar que las generaciones futuras enfrenten los mismos retos de violencia que México ha vivido en los últimos años.