PAN, EN SU PEOR MOMENTO SUEÑA CON DAR PELEA EN 2027 Y RECUPERAR LO PERDIDO
Prueba de lo mal que están las cosas fue el proceso interno para elegir a su nuevo dirigente para los siguientes tres años; prevaleció el desinterés de los militantes, pues la abstención fue cercana al 65% del padrón de 277 mil 665 afiliados.
En el peor momento de sus 85 años de vida, luego de haber gobernado el país en dos sexenios consecutivos y tras su desastrosa participación en las elecciones presidenciales del 2 de junio de 2024, el Partido Acción Nacional renueva su dirigencia. Cuando parece estar más en camino a la desaparición, su nuevo jerarca Jorge Romero Herrera, quien sustituye a Marko Cortés, afirma que el PAN va a dar la pelea en 2027 y recuperará la mayoría en el país y las gubernaturas que ha ido perdiendo.
Prueba de lo mal que están las cosas en el PAN fue el proceso interno para elegir a su nuevo dirigente para los siguientes tres años, que culminó el domingo 10 de noviembre con la elección con voto a la que fueron convocados 277 mil 665 panistas. Sin embargo, prevaleció el desinterés de los militantes, pues la abstención fue cercana al 65 por ciento del padrón de los afiliados. Jorge Romero, diputado federal con licencia, identificado con el grupo de Marko Cortés, le ganó a la ex legisladora tlaxcalteca Adriana Dávila, con el 80.1 por ciento de los votos.
Antes de pensar en el 2027 –cuando estarán en juego 15 gubernaturas y la renovación de la Cámara de Diputados–, deberá resolver con sus correligionarios si el PAN va a seguir manteniendo su alianza con el PRI, que le dejó pésimos resultados en todo el país, pues en 2024 perdió ‘de todas, todas’ ante la alianza encabezada por Morena. Jorge Romero Herrera es el nuevo dirigente del PAN y Karen Michel González es la secretaria general del partido.
En su primera declaración, la noche del mismo domingo 10 de noviembre, justificó el mal desempeño panista en elecciones: “Por todo aquello que crean que haya sido un error, por todo aquello que crean que pudimos haber hecho mejor, hoy ofrecemos una disculpa pública con todo nuestro honor. Como cuando un ser humano reconoce que puede mejorar, se lo decimos a México y lo hacemos con el compromiso de hacerlo mejor, de dar lo mejor de nosotras y de nosotros mismos para poder ser una auténtica alternativa de gobierno”.
Expresó que como dirigente buscará conservar lo que funciona, pero el PAN se habrá de renovar “como nunca”, y afirmó que el primer gesto será apertura total y sin miramiento. “Nunca más un joven, una mujer, un adulto mayor, se va a quedar fuera del Partido Acción Nacional”, promedió. Aseguró que los gobiernos que actualmente tiene el blanquiazul serán retenidos, y respecto a futuras elecciones, remarcó que hay conciencia de que el partido no compite contra Morena, sino contra la fuerza del Estado. Ante ello, el PAN se va totalmente a las calles.
Se refirió al 54 por ciento de votos obtenidos por Morena en la elección presidencial e indicó que “eso significa que hay un 46 por ciento en este país que no votó por ellos; que no te vengan a decir que nueve de cada diez mexicanos les aplauden o se sienten en un país maravilloso”. Y cerró su perorata, aseverando: “Esta dirigencia viene a ganar elecciones y mientras más nos subestimen, más vamos a ganar. Nos vamos a matar por estar en la calle, así vamos a ganar”.
La ex diputada Adriana Dávila reconoció que los números no le favorecieron, pero hizo hincapié en que no está convencida de la legitimidad del proceso. Desde un inicio no se tuvo certeza, se violó la legalidad y fue una elección inequitativa, acusó. Al referirse a la poca asistencia que se registró el 10 de noviembre en las urnas, afirmó que “las cargadas no entusiasman”.
Y remató: “Nadie puede sentirse orgulloso cuando alrededor del 70 por ciento de los panistas no fue a votar. Las almas no se mueven con dinero sino con ideas y conductas dignas de ser imitables”.