La líder opositora venezolana María Corina Machado fue galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2025, convirtiéndose en la primera figura política del país en recibir esta distinción por su lucha pacífica en defensa de la democracia y los derechos humanos. Revista Guinda trae los detalles.
María Corina Machado gana el Premio Nobel de la Paz 2025
El Comité Noruego del Nobel anunció este viernes que María Corina Machado gana el Premio Nobel por “su compromiso inquebrantable con la libertad política y la resistencia no violenta frente a regímenes autoritarios”. La noticia fue recibida con emoción en Caracas y con sorpresa en varias capitales del mundo, donde se esperaba que el reconocimiento recayera en figuras vinculadas a conflictos más recientes.
Machado, líder del movimiento Vente Venezuela, dedicó el premio “a todos los que nunca se rindieron, a quienes resistieron con dignidad, sin odio y sin miedo”. Su discurso, breve y contundente, apeló a la esperanza: “Hoy Venezuela se levanta como símbolo de lo posible cuando la verdad no se negocia”.
De la resistencia política al reconocimiento mundial
El anuncio llega después de dos décadas de enfrentamiento político entre Machado y el régimen de Nicolás Maduro. Su liderazgo se consolidó tras las elecciones fallidas de 2024, cuando denunció fraude electoral y encabezó manifestaciones masivas que, pese a la represión, mantuvieron su carácter pacífico.
Analistas internacionales coinciden en que el Nobel premia no solo a una mujer, sino a una estrategia: la resistencia cívica. El jurado destacó que, en tiempos de polarización global, el caso venezolano representa “un ejemplo de cómo la democracia puede defenderse sin armas, solo con la palabra y la convicción”.
Este año contendían figuras tan dispares como Donald Trump y Víctor González Torres, el “Doctor Simi”. Para nadie es un secreto la obsesión que es para el mandatario estadounidense el obtener el premio, que de tener éxito su propuesta de paz para Medio Oriente se convertiría en un legítimo contendiente, González Torres, por otro lado, tuvo la nominación al premio Nobel por tercera vez como cabeza de la fundación Por un México Mejor gracias a la organización de Rigoberta Menchu.
Un galardón que cambia el tablero político
Para Venezuela, el premio tiene un impacto que trasciende lo simbólico. Según especialistas, este reconocimiento internacional podría acelerar los llamados a elecciones libres y presionar al gobierno de Maduro a reabrir el diálogo político. “El Nobel le da a Machado una legitimidad moral incuestionable”, afirmó un diplomático europeo consultado por medios suecos.
El legado de una voz incómoda
Desde su irrupción en la escena pública, María Corina Machado ha sido una figura divisiva, pero constante. Ingeniera industrial de formación, su tránsito por la política ha estado marcado por la persecución, el exilio temporal y la censura. Pese a ello, su discurso ha evolucionado de la confrontación frontal a la resistencia civil.
Este Nobel de la Paz, según el jurado, reconoce ver también en el mundo “…las mismas tendencias a nivel mundial: el Estado de derecho abusado por quienes ostentan el poder, la prensa libre silenciada, los críticos encarcelados y las sociedades empujadas hacia regímenes autoritarios y la militarización. En 2024, se celebraron más elecciones que nunca, pero cada vez menos son libres y justas.”
”. Para muchos, su figura encarna el relevo de una generación que busca reconstruir el país desde la verdad, sin renunciar a la paz y mostrar al mundo cómo se debe hacer.