México y EE.UU. revisan reapertura fronteriza para exportación de ganado tras segundo cierre por gusano barrenador
A quince días del segundo cierre de la frontera estadounidense a las exportaciones mexicanas de ganado en pie, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, informó este lunes que sostendrá una conversación telefónica con su homóloga estadounidense, Brooke Rollins, para evaluar los avances en el control del gusano barrenador del ganado (GBG) y abordar la posibilidad de reanudar el comercio ganadero entre ambos países.
A través de un mensaje en la red social X (antes Twitter), el titular de la Sader señaló que continuará informando sobre el desarrollo del tema, sin ofrecer detalles adicionales, aunque confirmó que las conversaciones entre ambos gobiernos se mantienen activas.
“Hoy tendré una llamada con la secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, para hablar sobre la campaña contra el gusano barrenador y la reapertura de la frontera al ganado de pie”, escribió Berdegué.
Segundo cierre en menos de seis meses
El pasado 11 de mayo, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) anunció una suspensión de 15 días a las importaciones de ganado vivo, bisontes y caballos provenientes de México, debido a la persistente detección del gusano barrenador, una larva que pone en riesgo la salud del hato ganadero estadounidense.
La medida fue la segunda en menos de seis meses. El primer cierre se implementó a finales de noviembre de 2024, luego de que se confirmara la presencia del parásito en Chiapas, lo que generó una suspensión de casi tres meses en las exportaciones pecuarias mexicanas. Aunque en ese entonces se logró reabrir parcialmente la frontera tras aplicar medidas de control sanitario, los recientes hallazgos han encendido nuevamente las alertas.
Sin pronunciamiento de Estados Unidos al concluir el plazo
Pese a que este lunes concluyó el plazo establecido por el USDA para revisar la estrategia conjunta, las autoridades estadounidenses no han emitido aún un comunicado oficial sobre los resultados de las inspecciones ni sobre la eventual reapertura del comercio ganadero.
El silencio ha generado incertidumbre entre productores mexicanos, especialmente en estados fronterizos como Sonora, Chihuahua y Coahuila, donde la exportación de ganado representa una parte crucial de la economía local.
Campaña binacional contra el gusano barrenador
Desde la detección inicial del GBG en territorio mexicano, ambas naciones han intensificado su cooperación para frenar la propagación de la plaga. El gobierno mexicano ha implementado acciones de vigilancia epidemiológica, inspecciones sanitarias al 100% del ganado y un plan de regionalización sanitaria para delimitar áreas afectadas, zonas de amortiguamiento y regiones libres del parásito.
El gusano barrenador (Cochliomyia hominivorax) representa una amenaza significativa porque sus larvas se alimentan del tejido vivo de los animales, provocando lesiones, infecciones y en muchos casos la muerte. La erradicación de esta plaga en América del Norte había sido considerada un logro sanitario, por lo que su reaparición ha encendido alertas tanto en México como en EE.UU.
Expectativa de resolución
La llamada entre Berdegué y Rollins podría ser clave para destrabar el conflicto comercial, establecer nuevas medidas sanitarias coordinadas y brindar certidumbre a los sectores ganaderos de ambos países.
Mientras tanto, productores y exportadores mexicanos se mantienen a la espera de una resolución que permita reabrir el flujo comercial, evitar mayores pérdidas económicas y preservar el estatus sanitario binacional construido durante décadas.