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Quedan fuera millones de contribuyentes del reembolso del SAT

Quedan fuera millones de contribuyentes del reembolso del SAT

El SAT dio a conocer que diversos casos fueron descartados por no cumplir con las condiciones necesarias para acceder al saldo a favor

 

CIUDAD DE MÉXICO.- Millones de contribuyentes quedaron fuera de la devolución automática de impuestos, tras el cierre del periodo de declaraciones anuales en México.

 

 

El Servicio de Administración Tributaria (SAT) dio a conocer que diversos casos fueron descartados por no cumplir con las condiciones necesarias para acceder al saldo a favor, un beneficio fiscal que suele regresar el excedente del Impuesto Sobre la Renta (ISR) pagado durante el año.

 

 

El organismo no publicó una lista con nombres, pero sí identificó las causas comunes que provocaron que los contribuyentes fueran excluidos: desde errores en la información presentada, hasta incumplimientos con las fechas límite, pasando por datos bancarios inválidos o declaraciones incompletas.

 

 

 

 

El saldo a favor, cuando es procedente, se deposita en la cuenta bancaria registrada por el contribuyente.

 

Sin embargo, esa devolución depende del cumplimiento estricto de criterios técnicos y normativos, que no fueron alcanzados por un número considerable de personas físicas durante el ejercicio fiscal 2023.

 

¿Qué errores te pueden dejar fuera del reembolso del SAT?

Aunque el derecho a solicitar devolución existe, el SAT determina automáticamente qué declaraciones son susceptibles de recibir el saldo a favor sin trámite adicional. Si se detecta alguna irregularidad, la solicitud queda detenida y pasa a revisión manual, retrasando o negando el reembolso.

 

Entre los principales motivos por los que un contribuyente puede quedar fuera del proceso automático están:

 

Presentar la declaración fuera de plazo (el cual venció el 30 de abril).

Registrar una cuenta bancaria incorrecta o inexistente.

Tener diferencias entre los ingresos reportados y los comprobantes fiscales.

Declaraciones incompletas o mal llenadas.

Estar bajo revisión fiscal o tener adeudos pendientes.

 

El impacto es significativo: quienes queden fuera del sistema automático deberán iniciar una solicitud formal de devolución, que implica más tiempo, seguimiento constante y, en muchos casos, documentación adicional para justificar el saldo reportado.

 

 

¿Quiénes están obligados a declarar ante el SAT?

El SAT establece una serie de supuestos que obligan a las personas físicas a presentar su declaración anual. La obligación aplica si el contribuyente:

 

Tuvo más de un patrón en el año.

Obtuvo ingresos por honorarios, arrendamientos o actividades empresariales.

Percibió más de 400,000 pesos anuales.

Recibió sueldos del extranjero o de fuentes no obligadas a retener impuestos.

Generó ingresos por venta de bienes o inversiones.

Cobró jubilaciones o pensiones que exceden los límites establecidos en la Ley del ISR.

Por el contrario, quienes trabajaron todo el año con un solo patrón, cuyos ingresos fueron menores a 400,000 pesos y que tuvieron correctamente aplicadas sus retenciones, no están obligados a presentar declaración. En esos casos, el empleador se encarga del cumplimiento fiscal.

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¿Qué hacer si no recibiste tu saldo a favor?

Para los contribuyentes que tenían expectativas de recibir una devolución automática y no la obtuvieron, el SAT habilita la opción de presentar una solicitud manual de reembolso. Este trámite se realiza a través del portal del SAT y requiere:

 

Ingreso con RFC y contraseña o e.firma.

Validar o corregir la cuenta CLABE.

Indicar el ejercicio fiscal y adjuntar los comprobantes de deducciones si se requieren.

Dar seguimiento desde el Buzón Tributario, donde se notifican observaciones.

Cabe resaltar que el proceso no es inmediato: puede tomar varias semanas o incluso meses dependiendo del tipo de revisión, la carga administrativa del SAT y la claridad de la información proporcionada.

 

¿Cuál es la implicación de aparecer en la lista negra del SAT?

Aunque el término “lista negra” no se refiere a un documento oficial con nombres públicos, el SAT utiliza esta categorización para referirse internamente a los casos que no cumplen con los criterios de devolución automática. Estar en esta condición no implica una sanción, pero sí puede generar inconvenientes para el contribuyente:

 

Pérdida del derecho a recibir el saldo a favor en corto plazo.

Mayor carga de trámites.

Revisión detallada de la declaración y deducciones.

Riesgo de auditoría si se detectan inconsistencias graves.

Además, quienes repiten errores año tras año pueden ser considerados como casos de alto riesgo fiscal, lo que podría afectar su historial frente al fisco y generar inspecciones más estrictas en ejercicios futuros.

 

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