Crisis en la producción de maíz en México
México enfrenta una crisis significativa en la producción de maíz, con una caída a niveles no vistos desde 2014. Para 2024, se estima una producción de 23.3 millones de toneladas, de las cuales 20.3 millones corresponden a maíz blanco, la cantidad más baja en 12 años. Este descenso pone en riesgo la autosuficiencia alimentaria, particularmente en productos esenciales como la masa y las tortillas.
Factores como las sequías severas en estados clave como Sinaloa, Sonora y Tamaulipas, así como la preferencia por cultivos más rentables como las berries, han reducido la superficie dedicada al maíz de 7.7 millones de hectáreas a 7 millones en la última década. Mientras tanto, el área destinada a las berries ha crecido de 17 mil a más de 55 mil hectáreas.
La dependencia de México en la importación de maíz ha aumentado. En 2023, se importaron 19.64 millones de toneladas, y para 2024, las proyecciones superan los 23.9 millones, un incremento del 21%. La mayoría del maíz importado es amarillo, proveniente de Estados Unidos, lo que resalta la vulnerabilidad del país ante el suministro externo.
Por otro lado, la prohibición del maíz transgénico para consumo humano sigue siendo un tema controversial. La resolución del panel del T-MEC, tras una demanda interpuesta por los socios comerciales de México, venció recientemente, dejando incertidumbre sobre posibles restricciones.
Juan Carlos Anaya, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, señaló que esta baja en la producción, combinada con el aumento de las importaciones, podría generar un alza en los precios del maíz blanco y de la tortilla, afectando el bolsillo de los consumidores mexicanos.
A pesar de los esfuerzos del gobierno para reducir las importaciones de maíz amarillo entre un 30% y 40% en 2024, la crisis actual complica alcanzar estos objetivos, posicionando a México como el mayor importador de maíz del mundo y evidenciando su creciente dependencia de mercados internacionales.