México y Estados Unidos Refuerzan Estrategias Contra el Gusano Barrenador del Ganado
Los gobiernos de México y Estados Unidos han reafirmado su compromiso de trabajar de manera conjunta para prevenir y combatir el gusano barrenador del ganado (GBG), una plaga que representa un riesgo significativo para la producción alimentaria y el comercio en la región. A través de sus respectivas agencias sanitarias, ambos países han establecido estrategias interinstitucionales orientadas a la prevención, control y erradicación de esta amenaza.
El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de México, Julio Berdegué Sacristán, se reunió con Jennifer Moffitt, subsecretaria de Programas de Comercialización y Reglamentación del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), para discutir los esfuerzos realizados en la frontera sursureste mexicana. Este enfoque incluye revisiones exhaustivas de ganado, tratamiento de heridas y administración de medicamentos preventivos, así como la implementación de puntos de verificación estratégicos.
La colaboración entre ambos países data de hace más de 70 años, basada en enfoques científicos que han fortalecido la seguridad alimentaria en América. En este contexto, México ha propuesto un esquema de regionalización para proteger zonas libres de la plaga y garantizar la continuidad del comercio de ganado en pie hacia Estados Unidos, en caso de detectarse algún brote.
Por su parte, Moffitt destacó la importancia del comercio de ganado mexicano y subrayó que el USDA está desarrollando propuestas para mitigar riesgos, aprovechando las nuevas tecnologías disponibles. Además, señaló que el gobierno estadounidense apoya iniciativas en Centroamérica, como la apertura del Centro de Eclosión y Dispersión de Mosca Estéril del GBG en Honduras, para frenar la propagación del insecto hacia el norte del continente.
A la reunión asistieron funcionarios clave de ambos países, incluyendo representantes del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), y el USDA, quienes trabajan coordinadamente para enfrentar este desafío sanitario y económico.