El TLCUEM endurece regulaciones para autos eléctricos

El nuevo Tratado de Libre Comercio entre México y la Unión Europea (TLCUEM) establece normas más estrictas para la importación de autos eléctricos. La Comisión Europea confirmó que estas medidas buscan regular el origen de los componentes utilizados en los vehículos enviados al mercado europeo, exigiendo que un mayor porcentaje de piezas sea fabricado en la región o en países con acuerdos específicos.
Estas restricciones se enmarcan en el interés europeo de fomentar una cadena de suministro más sostenible y alineada con sus objetivos ambientales. Esto significa que las empresas mexicanas que exportan autos eléctricos deberán adaptarse a los nuevos estándares para mantener su acceso al mercado europeo, lo que podría representar desafíos logísticos y financieros.
El anuncio, realizado el 17 de enero por la Comisión Europea, se produce en el contexto de la modernización del acuerdo comercial vigente desde el año 2000. Este endurecimiento en los requisitos forma parte de una estrategia más amplia para garantizar que los productos comercializados cumplan con las normativas de sostenibilidad y competitividad global.
Las negociaciones del TLCUEM también estuvieron marcadas por tensiones relacionadas con las reformas energéticas en México. Representantes europeos, como el eurodiputado Borja Giménez Larraz, señalaron que las políticas mexicanas impactaron negativamente los acuerdos alcanzados previamente, generando retrasos en la firma del tratado.
Aunque la Comisión Europea asegura que las negociaciones concluyeron a nivel ministerial, en México las autoridades, como la presidenta Claudia Sheinbaum, insisten en que el diálogo continúa. Se prevé que el acuerdo pase por una revisión jurídica antes de su ratificación por el Consejo Europeo en junio y el Parlamento Europeo en septiembre, lo que podría influir en el comercio de vehículos eléctricos en los próximos años.