México incrementa su capacidad en energía eólica y solar, según estudio de Broadminded
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Un reciente estudio titulado Energía Verde en América Latina, realizado en colaboración con Broadminded, detalla el panorama de las energías renovables en la región, destacando el crecimiento de México, Brasil y Chile como principales potencias en este sector. Sin embargo, a pesar de los avances, México enfrenta importantes retos para alcanzar su potencial energético.
En México, la energía eólica y solar han incrementado su participación en la matriz energética, representando el 12% del total. Entre 2020 y 2023, la generación eólica creció ligeramente de 19,702 a 20,700 GWh, mientras que la solar mostró un avance significativo, pasando de 9,115 a 18,211 GWh. Sin embargo, fuentes como la geotérmica y la hidráulica han registrado descensos. La geotérmica disminuyó de 5,320 a 4,321 GWh, y la hidráulica, aunque sigue siendo la fuente renovable con mayor acumulado histórico (721,735 GWh entre 2000 y 2023), bajó de 26,817 a 19,568 GWh en el mismo periodo.
El informe subraya que México tiene un gran potencial debido a sus recursos naturales y ubicación estratégica, pero enfrenta el desafío de mejorar su infraestructura de transmisión eléctrica para adaptarse a la transición energética. Además, el sector se muestra optimista ante la nueva administración encabezada por Claudia Sheinbaum, quien se ha comprometido a aumentar la producción de energía renovable del 15% al 50%.
A nivel regional, América Latina destaca por generar el 60% de su electricidad a partir de fuentes renovables, consolidándose como una de las redes eléctricas más limpias del mundo. Brasil lidera la producción renovable con el 58% de la nueva capacidad prevista para 2030, seguido por Chile y México, que se espera aporte el 10% de la capacidad renovable regional en ese mismo año.
Según Patrick O’Neill, socio de Sherlock Communications, la región tiene el potencial para ser un exportador clave de energía renovable, siempre y cuando supere desafíos regulatorios, asegure financiamiento adecuado y equilibre la transición de los combustibles fósiles con las oportunidades que ofrece la energía verde.