La Comisión Europea anunció este jueves que analizará detenidamente la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer un arancel del 25% a las exportaciones europeas de automóviles a partir del 2 de abril. La presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, lamentó la medida y aseguró que la Unión Europea (UE) seguirá buscando soluciones negociadas mientras protege sus intereses económicos.
“Evaluaremos este anuncio junto con otras medidas que Estados Unidos prevé implementar en los próximos días”, declaró Von der Leyen en un comunicado, en el que insistió en que “los aranceles son impuestos perjudiciales para las empresas y aún peores para los consumidores”, tanto en EE.UU. como en Europa.
La presidenta de la Comisión Europea recalcó que la industria automotriz es clave para la innovación, la competitividad y la creación de empleo de alta calidad en ambas regiones, gracias a las cadenas de suministro profundamente integradas entre EE.UU. y Europa.
Impacto comercial y postura de la UE
La imposición de aranceles se produce apenas un día después de la visita a Washington del comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, quien sostuvo reuniones con altos funcionarios del gobierno de Trump en un intento por negociar un acuerdo “justo” y evitar “aranceles injustificados”.
El presidente estadounidense firmó el miércoles la orden ejecutiva que impone estas tarifas a vehículos y camiones ligeros, argumentando que la medida podría generar entre 600 mil millones y un billón de dólares para las arcas de EE.UU. en los próximos dos años.
Trump justificó la medida afirmando que busca atraer a los fabricantes de automóviles extranjeros para que instalen plantas de producción en suelo estadounidense y así eviten los nuevos gravámenes. Además, anunció que el 2 de abril, bautizado como el “día de la liberación”, presentará una nueva batería de aranceles recíprocos dirigidos a países que actualmente mantienen impuestos aduaneros sobre productos estadounidenses.
Desde su regreso a la Casa Blanca el pasado 20 de enero, Trump ha adoptado una postura más agresiva en materia comercial, aplicando aranceles a distintos socios comerciales para reducir lo que considera un déficit comercial injusto para Estados Unidos.
Posibles represalias de la UE
La Comisión Europea ha dejado claro que no descarta tomar represalias si EE.UU. mantiene su postura proteccionista. La semana pasada, Bruselas anunció que esperará hasta mediados de abril para aplicar sus primeras contramedidas en respuesta a los aranceles estadounidenses al acero y aluminio europeos, los cuales ya han entrado en vigor.
Este margen de tiempo, según la UE, tiene como objetivo dar espacio a la negociación con Washington y evitar una escalada comercial que perjudique a ambas economías. Sin embargo, si el gobierno de Trump no retrocede en sus medidas, Bruselas podría imponer tarifas adicionales a productos estadounidenses, intensificando la disputa comercial entre ambas potencias.
Por ahora, la Unión Europea insiste en que la mejor vía es el diálogo, pero advierte que está preparada para actuar en defensa de sus industrias y trabajadores.