Sheinbaum anuncia reunión con consejeros del INE
Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, anunció que se reunirá con los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) en la segunda semana de enero de 2025. En el encuentro se discutirá principalmente el impacto del recorte presupuestal al INE, que afectará la organización de la elección del Poder Judicial de la Federación (PJF) en 2025.
Sheinbaum señaló que la reunión está programada para la segunda semana de enero y aclaró que aún falta coordinar la fecha exacta con la presidenta del INE, Guadalupe Taddei. Esta reunión fue solicitada por los consejeros del instituto, quienes desean plantear sus necesidades presupuestales ante la mandataria. La presidenta reiteró su solicitud al INE para que haga pública la distribución de los recursos destinados a la organización de las elecciones judiciales. “Ellos tienen que hacer público en qué van a destinar los recursos y cuántos recursos se necesitan, de acuerdo con ello en la elección del Poder Judicial”, enfatizó Sheinbaum el 26 de diciembre.
La reunión se da en un contexto de controversia debido al recorte de presupuesto aprobado por la Cámara de Diputados al INE. Además de sus funciones ordinarias, el INE deberá organizar la elección del Poder Judicial de la Federación, un reto considerable dado el recorte presupuestal. El instituto había solicitado 13,205 millones de pesos para este proceso, pero con el ajuste presupuestal, solo recibirá 6,329 millones.
El Consejo General del INE ha expresado su preocupación sobre las implicaciones de este recorte. Los consejeros han coincidido en que, a pesar de la reducción, seguirán cumpliendo con su mandato constitucional de organizar elecciones, aunque enfrentan un panorama complicado. La consejera Dania Ravel Cuevas advirtió que el recorte pone en riesgo el equipamiento de los centros de votación, especialmente en términos de accesibilidad para personas con discapacidad. Además, mencionó otros impactos, como la contratación de personal eventual y la impresión de boletas de seguridad. La reducción de recursos también afectará la instalación de casillas, que requerirán más de 50,000 figuras, lo que aumentará la carga de trabajo al reducir el número de supervisores electorales y personal auxiliar.